viernes, 12 de septiembre de 2014

Calcomanías... ¡a la calle!

Mientras caminaba hacia el metro Garibaldi, encontré a dos señores tapizando un camión con un anuncio de café, les sobraba una gran parte del adhesivo, porque se encontraba a la altura de una llanta, pregunté y me dijeron que iban a tirarlo, que si lo quería. He utilizado algunas partes grabándole dibujos de fauna urbana, para regresar imágenes y material al lugar de origen: la calle.
El perrito de arriba duró bastante tiempo, incluso los de chalequito naranja que cortan el pasto en los parques, lo respetaron, en dos ocasiones. Luego fue desapareciendo, tres años después sigue la rama de la izquierda (porque ya no se reconoce algo qué destruir). 

Los pájaros no eran muy visibles, pero si alguien en su andar lograba dar con ellos... ¡! ...se buscaba que fuera potencial de salir al encuentro sorpresivo con alguien, o nada.



No sabía que la gente del anexo re-ubicado en el parque en que antes yo iba a correr, podía salir del mismo, si no hasta pegar este gatito muy cerca, tomarle foto, tener que hablar con uno de ellos, ver como llegaban otros, dar la vuelta controladamente y dar pasos cada vez más rápidos, sin correr. Pero sí noté (varios metros después) que al que acababan de llamar, fue a observar detenidamente mi dibujo.
El gato no debió sobrevivir, el concreto estaba además muy polvoso, los del anexo al menos hicieron que lo valiera. 

No hay comentarios: